El clima, la fala del consumo de agua, los rayos solares, los medicamentos y la alimentación son algunos de los factores que intervienen en la salud de la piel; un grupo de docentes de la Escuela de Nutriología nos explica cómo estos factores influyen en este cuidado.
Varias son las vitaminas que aportan a una piel más sana, así como ciertos ácidos grasos como el omega 3 y la ceramida. Sin embargo, el déficit de vitaminas, minerales y la aparición de enfermedades relacionadas con la piel.
Las enfermedades más comunes de la piel por falta de estos componentes, suele relacionarse con la dermatitis atópica, retraso en la curación de heridas, psoriasis e incluso ciertos tumores en la piel.
Vitaminas como la A, C, D, E, zinc y selenio aportan nutrientes para evitar estas complicaciones. Las frutas, vegetales, carne blanca, huevos, lácteos y cereales son algunos de los alimentos que contribuyen significativamente a contrarrestar las complicaciones de salud.
Expertos aconsejan
Para mantener un cuidado apropiado de la piel y evitar problemas graves las sugerencias son:
– Llevar una dieta sana, incluir alimentos ricos en nutrientes expuestos.
– Mantener un cuidado adecuado frente los rayos solares.
– Practicar algún tipo de deporte o hacer ejercicios para combatir el estrés que contribuye a los problemas de piel.
– Evitar el consumo de tabaco que aumenta las arrugas en la piel.
– Humectar la piel constantemente en el día.
