En la actualidad no existe un tratamiento nutricional específico para la COVID-19. Las pautas de alimentación están destinadas a atenuar la fiebre y los problemas respiratorios, otorgando una adecuada hidratación.
Se recomienda una alimentación saludable, equilibrada, suficiente, segura, adaptada al entorno, al individuo, sostenible y asequible.
HIDRATACIÓN
Una de las recomendaciones más importantes es mantenerse hidratado, esto se puede lograr consumiendo de 1,8 a 2 litros de agua al día. Es preferible consumir el agua pura; sin embargo, se puede adicionar a la alimentación caldos de vegetales, té, frutas y verduras.
El uso de gelatinas neutras o saborizadas sin azúcar son un buen recurso para las personas mayores que, muchas veces, tienen una sensación de sed disminuida y no desean consumir agua.
Como regla general para una alimentación saludable se debe evitar el consumo de bebidas gaseosas o edulcoradas.
CONSUMIR CINCO RACIONES ENTRE FRUTAS Y HORTALIZAS AL DÍA
Todas las frutas y verduras son bienvenidas, sin excepción. Se debe consumir tres raciones de frutas y dos raciones de hortalizas, prefiriendo las de temporada y proximidad.
CONSUMO DE ALIMENTOS INTEGRALES Y LEGUMBRES
Se debe incluir en la alimentación cereales y legumbres, priorizando el arroz y pan integral. Además, es aconsejable consumir legumbres mezcladas con verduras. En esta recomendación no se debería incluir bollería ni pastelería y se debe consentir su consumo en casos excepcionales.
CONSUMIR PRODUCTOS LÁCTEOS / LECHES FERMENTADAS
Se recomienda consumir productos lácteos naturales sin agregados de azúcar o miel; aunque aún existe la controversia sobre el consumo de sus derivados, es conocido que son productos de consumo diario, ricos en calcio. Cabe destacar que no existe evidencia científica comprobada de que consumir leches fermentadas mejore la inmunidad.
Se recomienda el consumo de frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y leches fermentadas para contribuir a una flora intestinal saludable.
CONSUMIR CARNES (POLLO-PESCADO-RES-HUEVOS-QUESOS)
Se aconseja el consumo de alimentos cárnicos, preferir el pollo y pescado; y evitar una alimentación a base de embutidos. Asimismo, es recomendable utilizar métodos de cocción a la plancha, horno, asado y vapor. Evitar las preparaciones fritas.
CONSUMIR FRUTOS SECOS Y ACEITE DE OLIVA
Se recomienda el consumo de frutos secos -sin agregados de sal- y aceite de oliva. Las recomendaciones emitidas son las mismas para una alimentación equilibrada.
EVITAR EL CONSUMO DE COMIDA RÁPIDA Y PRECOCIDOS
Los alimentos precocidos y la comida rápida no son recomendados para una alimentación sana. En periodos de cuarentena disminuye la actividad física y el consumo de este tipo de alimentos contribuiría a la ganancia de peso y a la aparición, en un futuro, de enfermedades crónicas no transmisibles.
PUEDE ALGÚN ALIMENTO O COMPUESTO AYUDAR A PREVENIR LA INFECCIÓN
En la actualidad hemos escuchado acerca de muchos productos que ayudarían a reforzar el sistema inmune; sin embargo, conocemos que es poco probable que su consumo disminuya el riesgo de contagio. Es necesario seguir las directrices de una alimentación saludable y manejar la higiene constante en la manipulación de alimentos, así como en la higiene personal.
PUEDE EL CONSUMO DE HIERBAS AYUDAR A PREVENIR EL CONTAGIO
No existe evidencia científica de que el consumo de hierbas pueda utilizarse para prevenir o tratar la COVID-19.
ESCUELA DE NUTRIOLOGÍA
UIDE
BIBLIOGRAFÍA:
Academia Española de Nutrición y Dietética, 2020.
Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas, Nutricionistas, 2020
Red de Nutrición basada en la evidencia, 2020
